Consultoría industrial · Software · Ingeniería de inyección
Por Miguel A. de Ortuzar

Moldpress sept. 2020. Gproy Planificación en 5 pasos

Quizás en las inversiones que un Taller deba realizar, siempre se deje la Planificación para, como se suele decir, empresas grandes. Esto es una visión equivocada sobre la Planificación, entre nuestros clientes tenemos empresas de 4, 9, 15, … personas planificándose. Y la impresión de los directores es la de; qué lástima no haber conocido la planificación hace muchos años. Estos comentarios identifican algo que siempre está sobrevolando la empresa en cualquier ámbito, la formación específica en algo como la Planificación. Antes de adquirir o cuando implantamos un software de Planificación, debemos exigir la formación específica en Planificación aplicada a nuestro taller, específica en nuestra actividad empresarial, como moldistas, matriceros, mecanizadores, etc., eso sí, ad ok, (ad ok, en cursiva), no una formación en Planificación general. Debemos ir de la mano de personas con experiencia real, concreta y contrastada en esos tipos de taller a los que hacemos mención, de lo contrario la formación no nos dará una visión concreta de cómo yo voy, en mi empresa a Estructurar, Estandarizar, Planificar y Replanificar, mis trabajos.

La gran duda de cualquier director es saber cuál es la capacidad real, la capacidad potencial y realmente qué estamos produciendo. La herramienta de Planificación de QSM está experimentada y está compuesta por 5 pasos muy claros, y que convertimos en deberes y en derechos que la dirección de un taller debe exigirse.
El primer paso que debemos conocer es nuestra capacidad de Producción por las actividades que hacemos, es decir, qué capacidad en horas tenemos realmente para Diseñar, Mecanizar, Erosionar, Ajustar, …en el 2020, pero no una sola estimación, debe ser consecuencia calculada del sistema con las variables que nos afectan en cada caso.
El segundo paso es poder simular en el propio proceso de la oferta qué fecha podemos dar o si podemos cumplir la fecha demandada por el cliente. Pero existe una pregunta que todos los directores nos hacemos, ¿cabría en la fecha un molde más?, ¿cómo calcula nuestro jefe de taller si caben o no más moldes a una fecha dada? y si no caben, ¿por qué actividad o por qué cantidad de horas de las actividades no nos cabe? ¿lo sabemos a tiempo real?

El tercer paso es Planificar aquellos trabajos que han entrado como pedidos, sean Moldes completos, modificaciones, o mecanizados, etc. Para esta fase al igual que para la realización de la oferta podemos utilizar unos Patrones de Planificación para los diferentes tipos de trabajos, lo que nos permite de forma muy ágil Planificar y trabajar hacia la estandarización, aunque cada molde sea diferente. Estos patrones tienen en cuenta las Fases y todas las restricciones de cada Posición de trabajo, incluso permite llevar las agendas de las subcontrataciones a proveedores externos.
El cuarto paso es que cada recurso persona y máquina sepa qué trabajo debe realizar en cada momento. A través de la Agenda de los recursos, cada uno de nosotros visualizamos el trabajo a realizar en fecha y hora prevista e interrelacionado con las siguientes tareas. También el jefe de taller puede visualizar cada recurso para qué Proyecto está trabajando en cada momento. Qué carga tiene, cuándo deja de tener carga. Resaltamos que al planificar estamos adelantándonos a las circunstancias y podemos corregir a mejor.
Por último, el quinto paso es poder imputar lo realizado y replanificar en cada momento, de forma ágil todos los cambios que se producen en el día a día. Quizás este último proceso sea el más importante resaltado por los usuarios actuales.

Leave a Reply